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A medida que las infraestructuras de red crecen en tamaño y complejidad, la necesidad de una gestión eficaz de las direcciones IP y de un enrutamiento eficiente se vuelve crítica. Las subredes desempeñan un papel vital en la división de redes más grandes en segmentos más pequeños y manejables, mientras que el enrutamiento garantiza que el tráfico se dirija correctamente entre estas subredes. Entender cómo crear subredes y configurar el enrutamiento es esencial para mantener una red organizada, escalable y segura.
Una subred (abreviatura de subred) es una porción lógicamente definida de una red IP. Las subredes permiten dividir una red grande en partes más pequeñas y manejables. Esto no sólo mejora el rendimiento de la red, sino que también aumenta la seguridad y simplifica su gestión. Las subredes ayudan a organizar las redes en función de departamentos, ubicaciones geográficas u otras agrupaciones lógicas.
Cada subred tiene su propio rango IP y se distingue por una máscara de subred única, que define el tamaño de la subred y su rango de direcciones.
La subred ofrece varias ventajas, entre ellas
Dividir una gran red en subredes más pequeñas garantiza que las direcciones IP se utilicen de forma más eficiente, evitando el agotamiento de direcciones.
Al segmentar el tráfico en subredes, se reducen la congestión y la latencia, lo que mejora el rendimiento general de la red.
Las subredes pueden aislarse entre sí, lo que permite un mayor control del acceso y el flujo de tráfico entre las distintas partes de la red.
Los problemas dentro de una subred específica pueden identificarse y resolverse más fácilmente.
Antes de crear una subred, debe determinar cuántos hosts habrá dentro de cada subred y cuántas subredes necesita. El tamaño de cada subred se basa en el número de direcciones IP que contendrá, que viene definido por la máscara de subred.
Las subredes suelen definirse utilizando la notación CIDR (Classless Inter-Domain Routing), que especifica el número de bits utilizados para la parte de red de la dirección IP. Por ejemplo, una subred definida como 192.168.1.0/24 utiliza 24 bits para la parte de red, dejando 8 bits para las direcciones host (lo que permite 254 direcciones IP utilizables).
La máscara de subred determina cuántos bits se asignan a la red y cuántos están disponibles para las direcciones de host. Cuantos más bits se asignen a la parte de red, menor será el número de direcciones de host disponibles.
A continuación se explica cómo calcular las subredes en función de las necesidades:
Máscara de subred | Notación CIDR | Anfitriones disponibles |
255.255.255.0 | /24 | 254 |
255.255.255.128 | /25 | 126 |
255.255.255.192 | /26 | 62 |
255.255.255.224 | /27 | 30 |
Para crear una subred, tendrás que determinar cuántas direcciones IP se necesitan para cada subred y, a continuación, seleccionar una máscara de subred adecuada. Por ejemplo, si necesitas 30 direcciones IP por subred, puedes elegir una máscara de subred /27, que permite 30 hosts.
Una vez que hayas calculado el tamaño de subred adecuado, asigna rangos IP a cada subred. He aquí un ejemplo de división de la red 192.168.1.0/24 en subredes más pequeñas:
Subred | Gama | Direcciones IP utilizables |
Subred 1 | 192.168.1.0/26 | 192.168.1.1 – 192.168.1.62 |
Subred 2 | 192.168.1.64/26 | 192.168.1.65 – 192.168.1.126 |
Subred 3 | 192.168.1.128/26 | 192.168.1.129 – 192.168.1.190 |
Subred 4 | 192.168.1.192/26 | 192.168.1.193 – 192.168.1.254 |
Cada subred tiene su propio rango de direcciones IP utilizables, reservadas para los dispositivos dentro de ese segmento de red.
Una vez creadas las subredes, hay que configurar el enrutamiento para permitir el tráfico entre ellas. Sin enrutamiento, los dispositivos de las distintas subredes no podrán comunicarse entre sí.
El enrutamiento es el proceso de reenvío de paquetes de datos entre redes o subredes. Un enrutador o conmutador de capa 3 se encarga de tomar decisiones sobre dónde enviar los paquetes en función de sus direcciones IP de destino.
Método en el que las rutas se añaden manualmente a la tabla de enrutamiento.
Utiliza protocolos como OSPF o RIP para actualizar automáticamente las tablas de enrutamiento.
Si su red es relativamente sencilla, puede utilizar el enrutamiento estático. A continuación se explica cómo añadir una ruta estática en Linux:
Abre el terminal y utiliza el siguiente comando para añadir una ruta:
sudo ip route add <red de destino> via <IP de puerta de enlace> dev <interfaz>.
Por ejemplo
sudo ip route add 192.168.2.0/24 via 192.168.1.1 dev eth0
Compruebe que se ha añadido la ruta:
ip route show
En Windows, las rutas estáticas pueden añadirse utilizando el comando route:
route add <red de destino> mask <máscara de subred> <IP de puerta de enlace>
Por ejemplo:
route add 192.168.2.0 mask 255.255.255.0 192.168.1.1
Para redes más grandes con múltiples subredes y routers, el enrutamiento dinámico es más eficaz. Protocolos como OSPF (Open Shortest Path First) y RIP (Routing Information Protocol) pueden gestionar automáticamente las rutas.
Para activar OSPF en un router Cisco, por ejemplo:
router ospf 1
red 192.168.1.0 0.0.0.255 área 0
red 192.168.2.0 0.0.0.255 área 0
Esto enrutará automáticamente el tráfico entre las dos subredes.
En entornos de nube como AWS, el enrutamiento entre subredes se configura a través de la consola VPC (Virtual Private Cloud).
Por ejemplo, para enrutar el tráfico entre dos subredes:
Característica | Enrutamiento estático | Enrutamiento dinámico |
Configuración | Rutas configuradas manualmente | Actualización automática mediante protocolos |
Lo mejor para | Redes pequeñas con subredes limitadas | Redes grandes y complejas con muchas subredes |
Protocolos utilizados | Ninguno | OSPF, RIP, EIGRP |
Escalabilidad | Limitado | Alta escalabilidad |
Gastos generales de gestión | Alta (requiere cambios manuales) | Baja (actualiza automáticamente las rutas) |
Defina subredes en función del número de hosts, la ubicación geográfica o los departamentos.
En entornos complejos, los protocolos de enrutamiento dinámico como OSPF simplifican la gestión del enrutamiento.
Supervisar periódicamente el rendimiento de las configuraciones de enrutamiento para identificar y resolver los cuellos de botella.
Implemente listas de control de acceso (ACL) y cortafuegos para proteger el tráfico entre subredes.
La creación de subredes y la configuración del enrutamiento son habilidades esenciales para cualquier administrador de red. Al segmentar adecuadamente su red en subredes, puede mejorar el rendimiento, aumentar la seguridad y hacer que la gestión de la red sea más eficiente. Comprender las diferentes opciones de enrutamiento, ya sea estático o dinámico, le permite elegir el mejor enfoque en función del tamaño y la complejidad de su red.
Alexander Timokhin
CCO
Alexander Timokhin
CCO